Hay personas que tienen la habilidad de embelesarnos con su presencia, aunque sea a través de la televisión.
Jesús Calleja, con su sencillez y su cercanía nos muestra su buen hacer en un sin fin de desafíos extremos, que desafían a su vez la imaginación de quienes desde el otro lado de la pantalla seguimos atentamente sus aventuras.
Particularmente su forma de contarnos con tanta naturalidad todos los contratiempos, desventuras y demás avatares, así como su capacidad de narrarnos y acercarnos a entornos, situaciones y personas que de otro modo se nos harían imposibles, logrando que de algún modo, vivamos y experimentemos a través suyo las dificultades y las emociones que cada reto conlleva.
Si haciendo zapping me topo con su programa, me quedo a verlo, me quedo a verle a él, por su felicidad de palabra, su espontaneidad, por la pasión con la que nos trasmite cada acontecer, por su forma de mirar a la cámara con sus amables ojos azules y su sonrisa cálida.
Jesús Calleja, ha conseguido que cada desafío extremo sea un agradable paseo de la mano de un hombre que enamora a la cámara y a quienes a través de ella le vemos.
Jesús Calleja, es la crónica de un hombre que haciendo sus sueños realidad esta siendo capaz de hacernos soñar a todos, llevándonos dulce e impetuosamente a través de lugares desconocidos y descubriendo juntos hermosos paisajes que cortan la respiración, algunos literalmente no solo por su belleza si no por lo extrema de su ubicación.
Jesús Calleja, capaz de sobrecogernos con cada aventura, capaz de hacernos vibrar en unos entornos naturales implacables la mayor de las veces, benevolentes en contadas ocasiones y siempre sobrecogedores, nos lleva a sentir la emoción y la magnitud de la impresionante belleza que nos muestra, no solo de paisajes y parajes sino de cada persona con la que se cruza y la suya propia al presentarnos todo un mundo para la mayoría desconocido y que se muestra apetecible a través suyo.
Capaz de trasportarnos en su mochila y dejarnos acompañarle en diversiones y disfrute de la naturaleza más extrema al tiempo que sufrimos sus desventuras como si fueran nuestras.
Nos hace accesibles montañas imposibles y lugares recónditos. Con él hemos conocido no solo sitios maravillosos, Jesús Calleja, ha hecho que la gente de a pie, vivamos la montaña y la naturaleza, en primera persona.
Gracias de corazón, desde otra ciudad de Castilla y León, Valladolid
Natividad Martín Fernández